Desarrollador Urbano: visibilidad y reconocimiento a esta figura

Por Andrés Brody, director de BRODYFRIEDMAN


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Tras la reforma votada en la Legislatura porteña en julio de este año, la figura del desarrollador urbano es parte del Código de Edificación de la Ciudad de Buenos Aires. Para quienes desde hace años trabajamos para profesionalizar la actividad, nucleados en la Cámara Empresaria de Desarrolladores Urbanos (CEDU) esto es un gran logro ya que los desarrolladores urbanos somos actores fundamentales en la evolución de una ciudad.


Hasta ese momento, el código sólo mencionaba a los arquitectos, proyectistas, gerentes y directores de obra. Pero a la hora de hablar del desarrollador, solamente se hacía referencia al propietario, comitente o dueño de la tierra. Y si bien éramos parte del sector,  quedábamos ocultos como empresas constructoras,  arquitectos, inversionistas o gente que hace negocios. Y en conclusión, no se entendía cuál era realmente nuestro trabajo. 

Para empezar a explicar y entender lo que hacemos, considero que lo más importante  era empezar por tener un nombre, pero alcanzarlo significó transitar un largo camino. El inicio de este fue en el 2004, cuando comenzó el boom de la construcción en la Ciudad de Buenos Aires, que se extendió hasta 2018, generando un cambio muy fuerte en la ciudad. 

Pero, ¿por qué es importante la definición? Porque al nombrar al desarrollador urbano, su tarea gana entidad como actor clave del sector: se reconoce su labor y se fijan responsabilidades. Además, el cliente o posible comprador de una vivienda sabrá desde el cartel, quién es la persona que realiza el trabajo sumando mayor transparencia a la operación. 

En un contexto como el argentino, en el que la construcción se financia con las preventas,  es importante que el cliente sepa a quién le entrega su dinero, que cada uno sepa a qué desarrollador urbano le está comprando. Cuanto más visibles seamos y la gente pueda conocernos, creo que también habrá un mejor reconocimiento y otra mirada sobre nosotros. 

Desde nuestro primer día, en BrodyFriedman trabajamos mucho para profesionalizar la actividad. Somos una empresa que comenzó en 2004 con un empleado y hoy es una compañía con 42 profesionales, un excelente equipo de trabajo que abarca todas las áreas del negocio: desde la adquisición de la tierra hasta la entrega de la llave al propietario el último día.

En estos 15 años, hemos hecho mucha fuerza para enaltecer la figura del desarrollador urbano, apoyándonos en el esfuerzo y respaldados por nuestros logros. Hoy esto es un hecho que nos llena de orgullo y nos ayuda a mirar hacia el futuro.


 
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